Sesiones al aire libre
Muy buenas a todos, hoy en esta entrada trataremos sobre las sesiones al aire libre.
Antes de hablar del equipo u otro tipo de detalles, les voy a dar un consejo:
Ya vivan en la Península Ibérica, en las islas Canarias o las Baleares, lo importante es conocer su provincia o isla, ya que eso nos dará una idea de la cantidad de escenarios naturales que tenemos para nuestras sesiones. Por lo que como primer punto importante es tener buenas localizaciones, ya sean parques, campo, playas, etc.
Pueden darse una vuelta con el coche o ver fotos de fotógrafos de tu zona y si te gusta algún rincón consultarle la localización. Los habrá que no lo digan… Sin ir más lejos un compañero de Madrid no me quiso desvelar un precioso rincón donde hizo una sesión de embarazo y otro que hizo una magnifica sesión de pareja con un atardecer increíble me dijo la localización, aunque este segundo está en Las Palmas de Gran Canaria y me es imposible, obviamente.
Pero no solo para sesiones con clientes, también es conveniente tener esas localizaciones para nuestros proyectos personales.
Una vez dicho esto, que de verdad es un punto muy importante, ya que eso nos dará más variedad en nuestras fotos y nos exprimiremos la cabeza para sacarle el mejor partido a cada situación, seguiremos con un de las grandes preguntas ¿Qué se necesita para realizar una sesión al aire libre?
Sin duda alguna la cámara va a ser nuestra compañera imprescindible.
Un cuerpo con un buen sensor que nos de calidad de imagen, nitidez y detalle en los resultados.
Lo que tiene que complementar a nuestro cuerpo son unos buenos objetivos y aquí surgen dos opciones:
1. Focales fijas, son más luminosas y se dice que dan mayor calidad. Con este tipo de lente eres tu quien se tiene que mover para encuadrar, lo que hace que te trabajes más la foto y tengas más ojo con la composición.
2. Focales zoom, aunque menos luminosas lo bueno es que con una sola lente que cubra un gran rango tienes suficiente.
Personalmente prefiero las lentes fijas, suelo llevarme dos a las sesiones (85mm, sobre todo para retratos y un 24mm), que son más que suficiente para realizar una sesión completa.
Todo lo que viene a continuación es de opción personal, ya que hay gente que no mete flash en sus sesiones ni ningún tipo de iluminación artificial, pero que yo lo ponga no significa que siempre lo utilice, pero si es un gran aliado.
Un trípode, procurando que no sea muy pesado, porque recuerda que vas a cargarlo y llevarlo a todos lados.
Flash y accesorios:
Como mínimo tener dos flashes y un pie para cada uno. Esto nos ayudará a crear escenarios bien iluminados. Además de poder hacer nuestros propios esquemas y controlar la luz un poco más a pesar de estar realizando la sesión al aire libre.
Recomiendo que al menos uno de los flashes funcione como esclavo.
Para que el flash reciba la señal de la cámara lo imprescindible es un emisor y un receptor. Importante que si no es de la misma marca de tu cámara y es otra marca, que sea compatible, para no tener problemas con la señal.
La parte de los accesorios es un mundillo interesante, ya que te puedes encontrar desde los más económicos que puedes hacer tú en casa, de calidad media e inventos muy chulos. Yo soy de las personas que consideran que si vas a cobrar un trabajo no hay que ser cutre y llevarlo todo correctamente e invertir para poder ganar.
Normalmente con un paragua y una ventana suele ser más que suficiente.
Pero también hay accesorios que van directamente en el flash y son un lujo, ya que los puedes llevar en un pequeña bolsa y no ocupan nada de espacio, no los he probado pero me han hablado solo maravillas los compañeros que si los utilizan y aunque es una pequeña inversión importante, sin duda creo que voy a ganar en salud en cargar menos equipo pesado en la espalda.
Les hablo de los productos de la marca MagMod (magnetmod), el kit ronda los 235 dólares y luego si no quieres todo el kit cada producto está entre 50 y 35 dólares aproximadamente. Pueden mirando en internet y echarles un ojo, les van a resultar interesantes y prácticos, no se asusten del precio.
También en las sesiones suele ser necesario un reflector (mínimo uno) para rellenar sombras o iluminar zonas, ya sea porque están muy oscuras o porque nos interesa resaltarlas.
Una vez claro la cámara, los objetivos, el flash, los accesorios (tanto el disparador como los accesorios) y el reflector, vienen un par de extras que nunca están nada mal tenerlos a mano, es más, es lo ideal.
Se recomienda llevar mínimo dos tarjetas SD, por si se llena la de la cámara, se rompe o extravía.
Sería adecuado llevar dos baterías (cargadas) para la cámara, ya que una sesión se puede alargar bastante y solo con esto estaremos a salvo de no tener que dejarla a medias y tener que decirle al cliente que hay que volver otro día.
¡¡Pilas!! Recuerden que el flash va con pilas, por lo que aparte de las que lleve puestas llevar un paquete extra o si son recargables llevar otro juego de pilas a tope.
¿Cómo se transporta todo este material?
Para la cámara y los objetivos utilizaremos una mochila acolchada que viene con diferentes apartados para llevarlo todo separado y no se choquen las cosas entre sí. La maleta tendrá que ser de dos asas ¿Por qué? Porque si no te destrozas la espalda, de esta manera el peso irá distribuido por igual y al llegar la noche no sentiremos como nuestro hombro se va a descolgar.
El trípode, el reflector y los accesorios del flash van en sus propios bolsitos de transporte fácil y sencillo, por lo que no son gran preocupación.
Para los pies de flash si no han venido con su propia funda te aconsejo que compres una grande donde meter los dos e incluso si te cabe el trípode también lo metería y así llevas menos bultos.
Lo importante es un buen equipo pero sin duda alguna para nuestra salud es que el equipo sea ligero y lo bueno es que la tecnología avanza y se pueden tener las dos cosas a la vez. Por eso invierte con cabeza y compra pensando en el futuro.
Espero que esta entrada les ayude.
¡¡Hasta la próxima!!
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